Reflexión del cierre de este Campeonato, que nos dejó muchas emociones y recuerdos.
Por Pedro Fassi
Me resulta difícil creer que ya estamos a 2 de diciembre del 2024, que ya se acerca el fin de otro año y que ya terminó un nuevo Campeonato de fútbol. Sinceramente, este año fue seguramente de las ediciones que más rápido se me pasaron. Eso debe ser, como dicen, porque “Cuando la pasas bien se te pasa todo en un segundo”. Entonces, puedo decir que este mes fue disfrutado al máximo por todas las personas que sienten que podría haber durado un poco más. De esto se trata, de vivir cada categoría y cada equipo que nos toque con la emoción que merecen, ya que, en un abrir y cerrar de ojos, pasas de conocer a tus primeros compañeros en la A o en la B, a jugar con tus amigos en la F, G y H y, más adelante, a vivirlo como padre, árbitro o entrenador.
Puede ser también, que cuando era más chico sentía que el Campeonato era interminable, que siempre iba a poder disfrutar sin preocupaciones de un fin de semana de puro fútbol. Hoy, con otra perspectiva y desde otro lugar, añoro esos días y trato de seguir disfrutando de esas pequeñas cosas que me hacen y me hicieron muy feliz. ¿Para qué? Para que nuestro querido torneo siga siendo para las nuevas generaciones lo que fue para nosotros y para generaciones anteriores.
La clave es, yo creo, que todos pongamos lo mejor de nosotros para resaltar todo lo bueno que nos da el Campeonato, dejando afuera todas esas actitudes y acciones que nos alejan de la mejor experiencia. El ambiente y el clima de esta fiesta deportiva lo hacemos entre todos para todos.